jueves, 27 de julio de 2017

Héroes de la calle

Hace unos dias vi una noticia, casi por casualidad, pues hace ya bastante tiempo que dejé de ver las noticias de la tele, ya que comprobé que me deprimían y me angustiaban. Y me apliqué un viejo proverbio árabe que reza así: " La mejor manera de ser feliz, es ignorar la realidad".

Y es lo que hago, ignoro todo lo que puedo, lo que pasa en el mundo. Y digo "todo lo que puedo" porque aunque quiera, "todo absolutamente" no puedo ignorarlo.

Pues como os decía, escuché una noticia, en la que se informaba de que un compatriota nuestro, Ignacio Echevarria, gallego, de Ferrol (A Coruña), había fallecido al defender a una mujer, de que fuese atacada, y posiblemente hubiese muerto ella, de no haber sido por su intervención, a manos de unos terroristas, que perpetraron un atentado.

Este lamentable incidente sucedió en Londres (Inglaterra) el día 3 de Junio pasado. Y desde ese preciso momento, nuestro compatriota, se convirtió de golpe y para siempre en un héroe (en un mártir diría yo) que entregó su vida a cambio de salvar otra.

Sucesos como este me provocan una profunda tristeza, por una parte, y por otra, es como si se encendiera una luz de esperanza, de que el ser humano, en su esencia más pura y espontánea es "bueno", en el mejor sentido de la palabra "bueno y generoso", de una generosidad "infinita", siendo capaz en un acto como el que hizo Ignacio, "heroico" de entregar sin cortapisas, su don más preciado y valioso, "su vida".

"GRACIAS IGNACIO, MUCHÍSIMAS GRACIAS, EN NOMBRE DE TODOS GRACIAS".

Pero en verdad te digo, que hubiese preferido un final menos trágico para ti, personas como tu las necesitamos "vivas" para poder seguir  haciendo el bien, allí a donde tus pasos te encaminaran.

Pero no pudo ser. Supongo que como dice la creencia, de que Dios se lleva siempre a los mejores, a ti te tenía que llevar, precisamente por eso, por ser de lo bueno "lo mejor".


Personas e historias como la de Ignacio, siempre han existido y seguirán existiendo, porque el ser humano es así, está en su naturaleza (a pesar de que hay quien piensa todo lo contrario) lo que pasa es que no lo practica con la asiduidad que sería deseable. Yo opino como dice Raphael en una canción suya muy antigüa "...hay mucho mucho más amor que odio..."

Recuerdo cuando eramos niñas, que a veces veía por la tele que hablaban de "niños héroes". En estos casos, no se si alguno de ellos tendría un final tan triste como el de Ignacio, pero en general, se trataba de niños y niñas que por sus circunstancias familiares y personales, no llevaban una existencia, como correspondería por su edad, sino que hacían trabajos y tenían obligaciones como si se trataran de personas adultas.
O bien por diferentes motivos, ya fuera salvar la vida a otras personas, ayudar a los demás,...etc, en definitiva, tener una actitud y un comportamiento, a vista de muchos "ejemplar".

Me estoy refiriendo, a lo que en 1963 surgió con el nombre  de "Operación Plus Ultra". Esta iniciativa (privada) escogía cada año a 16 niños y niñas, y los agasajaban con todo tipo de actos en su honor, en una "gira" por toda España, además de obsequiarles con un sin fin de regalos, becas, viajes, etc. Esta "operación" se estuvo haciendo año tras año desde 1963 hasta 1982.

También, y aprovechando el "tirón" de popularidad, se rodó en 1966 una película, muy nuestra, muy a nuestro estilo de aquellos años, vamos muy española, y de título, como no podía ser de otra forma, llevaba el de "Operación Plus Ultra".

Recuerdo que cuando daban noticias que referían sobre los niños de Plus Ultra, me quedaba como "encantada" mirando la tele, imaginando que yo era una de aquellas niñas.

¡Hay que ver que atrevida es la inocencia! Querer ser un niño Plus Ultra, pobrecillos, bien merecidos tenían los regalos que les pudieran hacer.
Niños de la Operación Plus Ultra 1977

La pena es que ahora, no existen cosas así y seguro que siguen habiendo niños y niñas, que por su sacrificio en pos de los suyos o de los demás, tienen y demuestran esa "pasta" de la que están hechos los héroes, y sin embargo nadie les reconoce nada, salvo, eso sí, si tienen la desgracia de perder la vida en uno de sus actos heroicos, como le sucedió a Ignacio, entonces, solo entonces, "cubren"  su memoria con condecoraciones, medallas, reconocimientos, y bla, bla, bla...

¡Que sí! que está muy bien, pero que está mucho mejor, reconocer el mérito a quien lo tenga, cuando puede disfrutarlo y vivirlo, ¡digo yo!.

Un beso a todas.

martes, 11 de julio de 2017

Nancy Solidaria

¡Hola a todas!

¿Como os va la vida?. Espero y deseo de todo corazón que ¡muy bien! Porque tal y como están las cosas, es muy fácil, encontrarse en una situación, digamos "complicada" por haber perdido el empleo y no encontrar otro.

Por haber sufrido una separación y una sentencia judicial, que no es favorable, puede dejar en una situación "difícil" a la persona afectada.

Por no poder hacer frente a las deudas...

En fin, que se yo, por mil y un problemas que tenemos, derivados en su gran mayoría del modelo de sociedad que tenemos y nos ha tocado vivir.

Esta mañana, al levantarme, me asomé a la ventana, eran las 7,30 h. Al ser domingo y temprano, no había mucho "movimiento".
Pues bueno, como os decía, estaba yo abstraída en mis pensamientos, cuando vi a un hombre caminando por la carretera (pues desde mi ventana, se ve la  N-II)  con una pequeña mochila a la espalda.

Nada de particular había en él salvo que andaba muy "cansinamente"" como si llevara el peso del mundo en esa mochila, y su atuendo no estaba lo que se dice o se puede considerar "limpio". Esto hizo que me fijase más en él, y reconocí, que se trataba de uno de los muchos "sin techo", que por desgracia tenemos en nuestra sociedad, en nuestro "primer mundo", en ese que nos venden como "avanzado", "progresista","creciente", "competitivo",...resumiendo "maravilloso".

Maravilloso ¿para quien?, para este señor de esta mañana seguro que no, y para tantos otros como él tampoco.

¿Para cualquiera de nosotras? que a pesar de no estar en su situación, al igual que a cualquier otro ciudadano, un mal día le empiezan a ir mal las cosas, y acaba como ellos.

Porque esto amigas es "patrimonio de todos"  por lo menos yo, así lo entiendo.

Queridas, yo de política no se, ni quiero saber, es más, creo que no se puede ni se debe hacer política de todo. Esto que hoy os expongo es un problema social, nuestro, de nuestros vecinos, amigos, familiares, de todos y cada uno de nosotros.

Cuando por televisión o en cualquier otro medio, veo anuncios, alentando a que contribuyamos y ayudemos, a aquellas personas que lo pasan mal, al otro lado del mundo, en países lejanos, en otros continentes, muy lejos... Siempre me hago la misma pregunta.
¿Por qué tenemos que irnos tan lejos, para ayudar a gente que lo necesita?, si aquí, en nuestro país, en nuestra ciudad, y si me apuras en nuestro barrio, puede haber personas que necesitan de nuestra ayuda.

¿Es que nos da vergüenza reconocer nuestra pobreza o qué? ¿a caso ignorando el problema se va ha arreglar solo? NO, entonces ¿qué nos hace falta para darnos cuenta, de que aquí, en España, también tenemos ese tipo de problemas, también se pasa mal, algunos muy mal.

Algunas voces dicen: " ya se hacen cosas". Sí es cierto, pero son muy escasos los medios que se destinan a "paliar" estas situaciones, y por otra parte invertimos en "cosas" que a nadie interesan.

¡Por favor! dejen ya de recortar y recortar y volver a recortar las prestaciones en sanidad, educación, servicios sociales  y las ayudas públicas. ¡Gracias!.
Al final solo les va a quedar las "tijeras" .

Cuando éramos niñas (yo pertenezco a esa generación que han dado por llamar "baby boom") estos problemas los veíamos muy lejanos.

En el colegio hacían campañas de recogida de alimentos y dinero (el DOMUN entre otros).

Para nosotros era "como un juego" llevar latas de melocotón o de piña, leche condensada, arroz, azúcar ...cosas así. Pensando que aquellos alimentos estaban destinados a niños (únicamente niños, como si los adultos no existieran, ni comieran) de países "remotos" y de otras razas, que no era la nuestra, sobre todo la negra, o la etnia negra, como lo llaman ahora.

Esto siempre me ha llamado mucho la atención, pues a pesar de los "esfuerzos" del Mundo por paliar ese problema (el del hambre y la miseria de esos países), a través de los años persiste.

Yo empiezo a ser ya un poco "mayorcita" y las campañas de captación siguen siendo las mismas, incluso hay más (de otras entidades tanto públicas como privadas) que se empeñan en "darte la comida" pues su horario preferido de emisión es precisamente ese.

Pero los niños ( y digo solo los niños, porque parece que son los únicos que pasan hambre, los demás no cuentan, además cuanto más pequeñitos mejor, los niños un poco mayorcitos, de más de 10 años, están estupendamente) siguen teniendo necesidad, hambre y enfermedades.

Pues como os decía amigas, por desgracia, en este mundo globalizado que nos han montado entre todos, o que hemos montado entre todos, esos problemas también están aquí, en nuestro país.

Mi adorada Nancy (que tiene un corazón de oro) y yo misma que también soy de su opinión, os instamos a que en la medida de vuestras posibilidades aportéis vuestro "granito de arena" para estas causas que son de todos.

No me estoy refiriendo a que deis dinero NO. Hay muchas formas de ser solidario, preguntad en vuestro Ayuntamiento o en la Parroquia de vuestro pueblo, barrio o ciudad, en la Cruz Roja, en ONGs que se dedican a estos menesteres.
Se necesitan personas, voluntarias, para hacer mil y una tareas en beneficio de todos. Tampoco hace falta que le dediquéis mucho tiempo si no podéis disponer de el. Todos podemos ser solidarios en la medida de nuestras posibilidades. "Todos ganamos".

Recordad el dicho: "Hoy por ti, mañana por mi".

Gracias a todas. Un beso.